El Bayern iba ganando 0x6 al Hoffenheim cuando en el minuto 77’ los ultras del club bávaro exhibieron pancartas ofensivas dirigidas a Dietmar Hopp, presidente del equipo local. El partido fue interrumpido, el Hoffenheim se retiró del campo y, los jugadores, equipo técnico y directiva del Bayern advirtieron a su afición. El partido se reanudó y ambos los conjuntos pasaron los últimos minutos del partido pasándose el balón entre ellos, algo que nunca se ha visto.