Está muy cerca el cambio técnico en el Real Madrid. Después de un mal empiezo de temporada de Julen Lopetegui, que culminó en la goleada en el clásico frente al Barcelona este domingo (5x1), el entrenador será sustituido por Antonio Conte.
El italiano llega esta mañana a Madrid para finalizar los detalles del contrato con los merengues y para ser presentado como nuevo entrenador, teniendo la misión de recuperar al equipo, que está apenas en el noveno lugar del campeonato.
El ex-Chelsea va a recibir un plantel tricampeón europeo, que no fue unánime (ni cerca) en cuanto a la salida de Julen Lopetegui, porque los propios jugadores tenían la convicción de ser parte del problema.
Uno de los jugadores que, según la prensa española, no ve con buenos ojos la llegada de Antonio Conte es el portero Thibaut Courtois, con quien el italiano tuvo algunas desavenencias en el paso por el Chelsea. Estuvieron en desacuerdo con la forma en que el técnico encabeza, basado en una postura autoritaria. Pero no es el único.
Hazard, que juega en los blues y que recientemente afirmó públicamente el deseo de ser jugador del Real Madrid, motivando movimientos con miras a la transferencia a corto plazo, también estará desilusionado con la elección, que le hipoteca las hipótesis de cambio para el Santiago Bernabéu. El segundo año de convivencia con Conte en Stamford Bridge no corrió nada bien y algunas reparaciones del técnico en público hacia la forma del belga hicieron que ambos prácticamente se han dejado de hablar.
Pero hay más. Las palabras de Sergio Ramos, que se pronunció en la zona mixta del Camp Nou en relación a la posibilidad de un nuevo entrenador: «Siempre he tenido buena relación con todos los entrenadores. El respeto no se gana, se impone. Véanse los entrenadores con quienes ganamos títulos. La gestión del balneario es más importante que el conocimiento de un entrenador».