Brasil cayó en los cuartos de final del Campeonato del Mundo. Los canarinhos dieron una parte de avance a Bélgica, salieron al descanso con 0x2 en el marcador y no consiguieron recuperar, aunque todavía han redujo (1x2). Se despiden del Mundial y del sueño del hexa. Sigue Bélgica para las semifinales.
Después de un giro épico en los octavos de final, abrumado por un final de locos en el duelo contra Japón, Bélgica tenía por delante un adversario siempre dificil en la partida de los cuartos de final: el Brasil, de Tite, capaz de lo mejor y...del peor..
Los héroes en el último partido, Chadli y Fellaini fueron promovidos al once de Roberto Martínez y fue una Bélgica muy bien montada que se presentó frente a los canarinhos. Los pentacampeones hasta tuvieron las primeras oportunidades para llegar al gol - destaque para el remate al poste de Thiago Silva -, pero no consiguieron llegar al gol en las varias ocasiones.
En el lado contrario, los diablos rojos aprovechaban los contraataques para asustar al adversario, beneficiándose de la falta de magia de jugadores como Neymar, Coutinho o Willian. La ventaja surgió de forma algo feliz, con Fernandinho a desviar al fondo de las redes de la propia baliza.
Brasil reaccionó relativamente bien a la inferioridad en el marcador, al conseguir crear algunos escalofríos en el área belga, siendo que, sin embargo, las mejores oportunidades salieron de dos remates de media distancia de Marcelo y Coutinho. Thibaut Courtois siempre atento y bien posicionado llegó (y bien!) para las amenazas de Brasil.
Antes del descanso, Bélgica amplió la ventaja, gracias a una bellísima jugada de contraataque. Gran tirada de Lukaku, pasando por varios jugadores de la canarinha, con el delantero del Manchester United a servir a Kevin De Bruyne, del vecino City, y fusiló la portería de Alisson Becker.
Se pedía mucho más a Brasil en el segundo tiempo. Los hombres de Tite se quedaron en la primera parte y Bélgica aprovechó para crear ventaja. Pero se desengaña quien piense que el juego quedó allí resuelto. No, Brasil no bajó los brazos.
Firmino, Douglas Costa y Renato Augusto eran soluciones Tite durante la segunda mitad y la verdad es que Brasil ha creado más peligro y también benefició de la fatiga de los belgas. Bélgica tuvo muchas dificultades para llegar a la portería de Alisson, a diferencia de Brasil que hizo de la portería de Courtois un objetivo apetecible.
A los 56 minutos, Milorad Mazic perdonó un penálti contra Bélgica, por supuesta falta de Kompany sobre Gabriel Jesús, aún antes del recién llegado Renato Augusto reducir la desventaja, asistido de forma exquisita por Coutinho.
El mismo Renato Augusto tuvo en los pies oportunidades para igualar el partido, a los 80 minutos, así como Coutinho, que desperdició una oportunidad clara, a los 83'.
El ritmo del 'samba' estaba alucinante y fue necesario Roberto Martínez colocar agua en la hervidura y reforzar el sector defensivo. Bien el entrenador español y bien la selección belga que consiguió sostener el ímpetu ofensivo de los canarinhos. Todavía mejor Thibaut Courtois con una defensa monstruosa al remate de Neymar, al minuto 90+3.
¿El sueño del hexa? Este se queda en el cajón. El sueño está ahora del lado de Bélgica.
1-2 | ||
Fernandinho 13' (p.p.) Renato Augusto 76' | Kevin De Bruyne 31' |
