Buenas noticias para el Real Madrid. Las primeras pruebas médicas a Mesut Özil confirman que el mediapunta no sufre una lesión grave y podrá jugar la final de Copa del Rey ante el Atlético el próximo día 17.
El alemán se torció el tobillo derecho durante el partido frente el Málaga y tuvo que abandonar el campo lesionado. Los doctores del club blanco son optimistas, aunque a lo largo del día se le realizarán otros exámenes médicos para descartar definitivamente que sufra una lesión de gravedad. Pensando en la Copa, Mourinho dará descanso a Özil en el choque liguero contra el Espanyol.